Día 10: Una canción de tu banda favorita

Primero tendría que comenzar por definir mi banda favorita. Aunque Zoé me fascina y me ha inspirado mucho y el Educador Musical dice que mi próxima tarea es enviarle una copia de mi novela a cada uno de los integrantes de Zoé, esa no es mi banda favorita. Sigue Placebo. Me fascina Placebo. Su pasión. Sus letras. Su sonido. Si Brian Molko supiera cuánto me ha inspirado en estos últimos años. Sin embargo, mi banda favorita no es Placebo.

Mi banda favorita es The National.

Hay una canción de The National para cada situación de la vida. 

Tal vez muchas bandas tienen eso. Así es que sabes que son buenas. Buenas de verdad. 

Una banda de rock independiente de Cincinatti que ha tenido un éxito enorme con su último disco Trouble Will Find Me. Sus discos son unos poemarios. Se aproximan a la música con sencillez y creatividad. Sus letras son profundas y abordan temas que no mucho artistas quieren abordar, sobre todo en un mundo en que Pitbull es rey, porque es mejor bailar una canción sobre mueve la colita que cantar al ritmo de tu dolor, tu depresión, la muerte o la drogadicción. La textura, la instrumentación de Placebo, sus arreglos y la voz de Matt Berninger, además del sentimiento que le imprime a cada frase que canta, me conmueve profundamente. 

Escucho mucho The National. Pienso mucho en sus canciones. Algunas las interpreto como yo quiero, otras simplemente considero que se parecen a mí. Que me describen. Como Patterns for Fairtales. Patrones para cuentos de hadas. Ya la he mencionado en este blog. Es una canción sobre tomar las canciones de un mix que se le hizo a un amante y convertirlas en cuentos de hadas, with glitter and some glue (con excarcha y algo de pega).   

Sin embargo, la que voy a escoger para hoy se llama Santa Clara. Está en un disco que consiguió el Educador Musical, un día, muy emocionado. “Mira encontré este disco de The National, se llama The Virginia EP y tiene un montón de versiones en vivo, además tiene una canción que se llama Santa Clara”. Es un poco triste. Es sobre fantasmas, y cómo se van y la vida sigue. Entonces pienso, ¿qué hace un escritor si no es convivir con fantasmas?

En cierta forma esa canción es para mí.

Sí. Yo a veces me convenzo que The National está hablando conmigo.

Creerse la música es un defecto.