No me importan los penes
No me
importan los penes. Me importan los pranes. Porque nos tienen viviendo en el
terror. Porque uno sale de la casa angustiado. A cualquier hora. O peor uno no
sale. Porque nos estamos imponiendo una especie de toque de queda. Porque estar
en un lugar después de las siete de la noche es un acto casi temerario. Porque
uno camina por la calle sintiendo que en cualquier momento le viene el
golpe.
No me
importan los penes. Me importa que vas a un supermercado y si no está vacío las
cosas están amontonadas en una esquina y tienen una hoja de papel bond escrita
a mano que dice cosas como, de a dos por persona. Me importa que uno tiene que
hacer preguntas como, ¿los niños cuentan como una persona? Me importan que se
arman peleas porque esa señora sale y vuelve a entrar. Y la gente se desespera
por una botellita de Maceite. En un país tropical la gente se pelea por aceite
de maíz. En el quinto productor de petróleo a nivel mundial. Con el barril por
encima de cien dólares. Eso es lo que me importa.
No me importan
los penes. Me importa que no se consiguen muchas medicinas. Me importa que tomo
un antialérgico y ayer hice una hora de cola y no había. Me importa que cuando
vas al médico le tienes que pedir un récipe alternativo, por esa misma razón.
Me importa que si consigues el medicamento el precio es exorbitante. Me importa
que cuando lo traduces a dólares no es tan caro. Pero no hay dólares. Y uno no
gana en dólares. Entonces es como si los dólares no importaran. Pero si
importan, porque son la divisa con que se importa, y es importado. Es
una gran confusión. Y lo subastan. Y todos sabemos para qué sirve la subasta. Todos lo sabemos.
No me
importa los penes. Me importa que los hermanos Fadoul siguen muertos. Me
importa que Franklin Brito sigue muerto. Y no pasa nada. Y no es que revivan.
Es que se haga justicia. Me importa que Simonovis sigue preso. Y tantos otros
presos políticos. Y no están presos el montón de ladrones que han desangrado
este país. Y ni los están investigando.
No me
importan los penes. Me importa que a cada rato pintan la autopista de amarillo
y todos sabemos que alguien se mete ese dinero en el bolsillo. Y me importa que
están planificando una autopista a La Güaira y el costo es una grosería, y es
obvio que alguien se está robando la plata. Y esa gente no está presa. Y no
hacemos nada. Me importa que aquí hay
muchos jóvenes que piensan que el que no roba es un pendejo. Me importa
que una persona que roba difícilmente se recupera y aprende el valor del
trabajo. Me importa que nadie los va a castigar y jamás se van a arrepentir.
No me
importan los penes. Me importa que aquí nadie quiere trabajar. No quiere
trabajar el obrero. No quiere trabajar la cajera del supermercado. No quiere
trabajar el empleado del banco. No quiere trabajar el gerente. No quiere trabajar el niñito de veintidós
años recién graduado porque si se enchufa gana más. Porque el sueldo no le da a
nadie. Nadie quiere trabajar. Nadie quiere, ni puede, hacer un emprendimiento,
porque registrar una compañía es imposible, porque si te va bien quién sabe si
te expropian, porque aquí el que no sabe ensuciarse las manos la va a tener
bien cuesta arriba.
No me
importan los penes. Me importa que la semana pasada mataron a golpes a una enfermera
en la Maternidad Concepción Palacios y seguimos como si nada. Pasamos la
noticia y de ahí al fundillo de Diosa Canales en cualquier portal de noticia
que quiere mantener las cosas light.
Me importa que la cifra de muertos ya se ha vuelto algo de cuentas. Me importa
que la vida a nadie le importa. Me importa que aquí la vida sigue y nadie se da
cuenta que aquí no hay vida.
No me
importan los penes. Me importa que aquí ya nadie respeta a nadie. Ni a
ancianos. Ni a niños. Ni a nadie. Aquí se respeta el dinero y las motos que
trancan la calle para que pase alguien en una cuatro por cuatro sin placa, que
no siempre es un boliburgués. Me importa que aquí hay gente que es chavista y
no se ha dado cuenta. Porque hace lo que le da la gana en todos lados. No sigue
las reglas ni del colegio de los hijos. Ni del condominio. Ni de la alcaldía.
Ni de la gobernación. Ni de nada. Eso sí me importa.
No me
importan los penes. Me importa que estoy triste. Me siento ajena a todo esto.
Me siento extranjera en mi propio país. Me siento que no quepo. Me siento que
no hay oportunidades. Ni futuro. Me siento que nadie escucha. Me siento que de
lado y lado perdimos la capacidad de escuchar. Que cualquiera que opine, o
aventure una crítica constructiva es destruido. Porque eso sí sabemos hacer.
Caerle encima a lo que sea. Me importa que nadie sabe lo que es la tolerancia.
Que no es lo mismo que dejarse pisar. Que mirar hacia al otro lado. Me importa
que aquí pareciera que no se entiende lo que es la reconciliación, ni la
unidad, ni el hecho de que en todos los sectores necesitamos de todos. Me importa que aquí cada vez somos más
mediocres y conformistas. Me importa que cada vez la brecha que nos separa del
resto de América Latina es más grande. Ni hablar del primer mundo. Y no lo
vemos. Porque creemos que de esfuercito en esfuercito no estamos tan mal. Porque
tenemos mucho talento y bellezas.
No me
importan los penes. Me importa que aquí nadie protesta. Y si protesta nadie
escucha. Me importa que aquí el tipo dice penes y eso es lo único que importa.
Cuando esos penes no sólo no me importan, sino que no son relevantes. Son
catorce años de quedarnos pegados en frases estridentes y de evadir los
problemas reales.
No hemos aprendido nada. Eso es lo que me importa.
Comentarios
Si, la moralidad y los conceptos de ética y están quebrados, no porque no sabemos sino porque todos estamos en la posición de "salvense quien pueda" y así entonces yo me justifico todas mis acciones consiente o inconscientemente sin importarme las demás personas. No tenemos tiempo de preocuparme del vecino o de que me atravieso en la via, o me robo los lapices de la oficina...
Sin embargo no todo esta perdido habra un cambio mas pronto que tarde, lo que pasa es que en el medio hay 30 millones de personas. Hay que seguir presionando por cambiar las cosas ...
Cuando adviertas que para producir necesitas obtener autorización de quienes no producen nada; cuando compruebes que el dinero fluye hacia quienes no trafican con bienes sino con favores; cuando percibas que muchos se hacen ricos por el soborno y por influencias más que por su trabajo, y que las leyes no te protegen contra ellos sino, por el contrario, son ellos los que están protegidos contra tí; cuando descubras que la corrupción es recompensada y la honradez se convierte en un auto-sacrificio, entonces podrás afirmar, sin temor a equivocarte, que tu sociedad está condenada."
Ayn Rand
Lo entendí porque soy una persona familiar, con una profunda identidad y un amor infinito a mi Tierra. Porque quiero que mi hija sea Venezolana y para ello, no basta con tener la cedula, ella debe convivir y sentir la idiosincrasia del Venezolano. Debe entender nuestras formas, nuestras maneras… Nuestro temperamento... Y adquirirlo.
Entiendo y respeto la opción y la decisión de cada uno, porque al final del camino lo único que queremos es vivir nuestra vida como mejor la entendemos, pero para los Venezolanos en general, emigrados, habitantes en nuestro país y sobre todo a los Venezolanos en Venezuela: No necesitamos más negativismo del que ya existe, no necesitamos más burla hacia nosotros mismos, no necesitamos desviar más nuestra atención.
Necesitamos proyectos de nuestra gente, necesitamos emprendedores, gente que invierta en su país, gente que crea con fe y entusiasmo.
Tengo tanta gente cercana y gente que voy conociendo con proyectos tan hermosos, gente que se independiza en áreas de Economía, Turismo, Gastronomía, Publicidad, Auditorías, Bellas Artes, Odontología, Administración, Construcción, etc., etc., etc. Que si es fácil, OBVIO que no es nada fácil… El martes estuve en un conversatorio de empresas responsables socialmente y nos indicaban que Venezuela está en el puesto No. 112 aprox. De todos los países del Mundo donde es viable invertir y gestionar una empresa, pero estamos en el puesto No. 14 donde la gente arriesga en su emprendimiento. Que quiere decir esto? Que aun con todas las limitaciones y restricciones de los ineptos, hay una población gigante que cree en sus sueños, que cree en su independencia, que cree en la economía de mercados….
También nos dijeron que una persona es capaz de influenciar a otras 10 en su entorno, si esto es así: Porque no brindar entusiasmo en las redes sociales en apoyo a todas los proyectos positivos que ocurren en el país.
Porque desgastarnos con los chistes malos y las estupideces de los payasos en el poder….
Enfoquémonos.-
Mi esperanza es cumplir 45 años y observar algún cambio.
Quizás estoy perdiendo los mejores años de mi vida en un país de nuestras características, quizás como me dijo un amigo Canadiense: estoy limitando mi experiencia de vida por la incompetencia de un gobierno.
Pero como yo le explique: estoy haciendo mi camino en el lugar que más me importa en el mundo, en el lugar donde conozco la vida, en el lugar donde soy ciudadana, en el lugar donde sonrío todos los días, donde siento a la gente, donde me hago prima de otra ciudadana en una hora de cola en el banco sin tener que verla de nuevo, donde todos los obreros son galanes, donde está la arepita de mi santa mae, donde me parieron a mí y donde yo parí a mi hija: yo creo en Venezuela. Y para empezar comparto con Ustedes este link de un proyecto interesantísimo que en 120 horas aproximadamente brinda la capacitación necesaria a una persona, a partir de los 14 años, para su inserción en el mercado laboral, dando herramientas en el uso de la tecnología, oratoria, atención al cliente. Etc.
Esto me hace reflexionar: No hay que dar el pez, hay que enseñarlos a pescar………..
Todo lo que nos ha sucedido en estos 15 años ha sido para nuestro propio crecimiento como ciudadanos, como país y si hay muchas cosas por cambiar en el discurso de la política actual: pero cambiémoslo desde nuestras acciones, desde nuestras interacciones en redes sociales, desde nuestro comportamiento en el tránsito, desde nuestras relaciones humanas…. Cada uno SI puede hacer algo por Venezuela.
http://superatec.org.ve/
Ciertamente es una manera de desahogo, y aunque vivo en el extrangero desde hace casi 11 años, me duele ver mi país caerse a pedazos, también a ver colegas míos "comiéndose un cable" y siempre preguntándome si aquí en Rep Dominicana les iría mejor...aveces no sé que responderles, porque yo misma, quisiera vivir en mi propio país, dá mucha nostalgia estar fuera, es así...pero nada amiga, fuerza, valor y mucha oración para que te llenes tú primeramente de paz, tolerancia y tengas la mente clara, para saber con firmeza, el próximo paso que quieras dar, sea bien quedarte en Venezuela o buscar nuevsos horizontes fuera de ella,,,,valentía!!! Dios te bendiga mucho, quien quiera que seas, y desde donde quieras que escribas...@ceinett / Ceinett Sánchez
Tiene que haber una forma, una vía a corto plazo, un accionar que nos permita enderezar el entuerto de país que nos están endilgando.
Te propongo unir esfuerzos para iniciar una búsqueda de ese camino.
Sé que nos es cosa fácil decidirse a involucrarse activamente en algo que se pueda interpretar contrario a los intereses de los actuales gobernantes de nuestro país, pero debe haber una forma.
La gente teme y con razón, ya hay más d uno preso por pensar diferente, o que ha perdido su empleo, o le han negado el crédito que tanto necesita, o que ha perdido su fábrica. En fin, que nos sentimos acorralados también.
Pero tiene que existir alguna forma.
Invito a los que postean aquí y a los que comentan a aportar sugerencias.
Yo empiezo sugiriendo una campaña en las redes sociales contra las colas para adquirir cualquier tipo de bien de primera necesidad.
Espero ansiosamente los aportes.
Estas reacciones son exactamente a las que se refiere Manuela Z. cuando dice que nos centramos en las cosas no relevantes.
Finalmente firmo Anonimo porque quiero.
Venezuela es otra. Los incentivos son tales de que nadie quiere trabajar y dependan del patrocinio de aquellos que tienen el poder en cada uno de sus escalones. No hay ningun motivo por el cual aquellos que controlan al pais quieran cambiar el status quo. Colombia nunca perdio la independencia de sus instituciones ni la libertad de la prensa. Venezuela necesita pasar por tiempos mucho peores para ver alguna mejoria algun dia. Quizas nuestros bisnietos lo veran. Los mios lo haran desde el exterior. Me siento afortunado de que ese es el caso.