Limpieza General de Mi Cerebro
La luz era como de medio día. Yo subía las escaleras mecánicas de un centro comercial. Tenía que comprar algo pero no recuerdo qué. Estaba con esa urgencia que uno tiene en los centros comerciales, uno siempre está buscando algo, es raro ir solamente a pasear. La escalera terminó y empecé a caminar, girando hacia mi derecha por un pasillo. El piso era gris, brillante, podía ver mi reflejo en las lozas de un material que no puedo nombrar. Y de repente allí estaba. Como en una especie de café. Las mesas eran redondas y grandes, los asientos eran de cuero rojo y estaban como empotrados a la pared. Sus manos estaban sobre los hombros desnudos de una mujer de pelo rubio, y los frotaban como si fueran una especie de genio maravilloso. La mujer tenía puesta una especie de toalla blanca, como si acabara de salir del baño. ¿Qué hace así vestida aquí? Pensé yo. Esa mujer está loca. Y él está todavía peor. Y claro que estaba peor. No me saludó. Me ignoró. Como si yo no fuera nadi...