El Amigo

FOTO: La Zárate Curioso que esta mañana hablando con mi hermana le digo algo que para mí es una máxima en la vida: a los amigos hay que quererlos como son. Uno puede tratar de cambiar a los hijos. Incluso a los hermanos. A los papás. Si el jefe no cambia, tarde o temprano uno busca otro trabajo o resuelve por otro lado. Si la pareja no se pone las pilas lo mandas a que recoja los corotos y coja de las de Villa Diego. Pero, los amigos no. Uno no se sienta con un pana y dice: bueno mira, si tú no cambias, esta amistad la vamos a tener que dejar hasta aquí. Puede ser que te alejes por un tiempo. Que te sientas porque algo te dolió. Incluso que decidas no hablar más nunca con esa persona porque no le perdonas algo o vice-versa, pero de ahí a que te pidan cambiar es otra cosa. Uno los acepta por lo que son. Y la verdad que si uno se pone a pensar, lo que le da color a esta vida. Lo que la hace tolerable. Es sin lugar a dudas, la amistad. El amor es necesario para vivir. Pero sin la amistad,...